Decenas de miles de personas se reunieron en las calles de Mashhad, Irán, para dar su último adiós al presidente Ebrahim Raisi antes de su entierro en su ciudad natal. Tras un trágico accidente de helicóptero, la nación llora la pérdida de un líder que estuvo en el poder desde 2021.
El fatal accidente, que también se cobró la vida del ministro de Relaciones Exteriores, Hossein Amir Abdollahian, ha sumido a Irán en cinco días de luto nacional. En medio de una atmósfera de duelo, la población se congrega para mostrar su respeto y honor al presidente fallecido.
La ceremonia de entierro marca el fin de tres días de funerales que han sido seguidos de cerca por el pueblo iraní, reflejando la importancia de los grandes eventos en el país desde la revolución islámica de 1979.
Mujeres, hombres y niños, muchos cubiertos con chador, caminan en procesión hacia el mausoleo del imán Reza, llevando fotos y flores blancas en un emotivo tributo al difunto líder. Mientras tanto, el vicepresidente Mohammad Mokhber ha sido designado como presidente interino hasta las elecciones del 28 de junio.
El pueblo iraní se prepara para un período de transición mientras el país se enfrenta a la incertidumbre sobre quién ocupará el cargo de presidente en el futuro. Con el inicio de la campaña electoral en el horizonte, el destino político de Irán está en manos del pueblo y de aquellos que buscan liderar la nación en tiempos de cambio.