Los hutíes, que controlan gran parte del norte de Yemen, informaron que los ataques aéreos estadounidenses perpetrados a primera hora de hoy lunes contra un centro de detención en la provincia septentrional de Saada acabaron con la vida de al menos a 30 migrantes africanos e hirieron a otros 50, según una estimación inicial.
La televisión hutí al-Masirah TV informó que 30 cuerpos fueron recuperados bajo los escombros y que los equipos de rescate seguían buscando posibles supervivientes.
El canal de televisión agregó que los otros 50 heridos, también inmigrantes ilegales africanos, fueron trasladados a hospitales.
Al menos ocho personas murieron anoche en los ataques aéreos de Estados Unidos contra Saná, la capital de Yemen bajo control hutí, indicaron las autoridades de salud hutíes en una declaración.
Decenas de personas resultaron heridas, de acuerdo con los cálculos iniciales. Los investigadores siguen buscando supervivientes debajo de los escombros de las tres casas bombardeadas por aviones cazas de Estados Unidos en el distrito de Bani Al-Harith, en el norte de Saná, dijeron las autoridades.
La televisión hutí Al-Masirah reportó en el transcurso del día cerca de 20 ataques aéreos estadounidenses contra varios lugares en el norte de Yemen, incluyendo la capital.
Los ataques se producen un día después de incursiones aéreas similares lanzadas por Estados Unidos contra dos casas en el sur y el norte de Saná, los cuales presuntamente dejaron dos muertos y diez heridos, de acuerdo con las autoridades de salud hutíes.
El Comando Central de Estados Unidos declaró previamente que los nuevos ataques aéreos tuvieron como objetivo dirigentes hutíes, según informaciones de la agencia de noticias Xinhua.
Las tensiones entre el grupo hutí y el ejército estadounidense han aumentado drásticamente desde que Washington reanudó el 15 de marzo los ataques aéreos contra posiciones hutíes en Yemen. Los ataques buscan disuadir a los hutíes de atacar la navegación vinculada con Israel y Estados Unidos en los mares Rojo y Arábigo.
