La fábrica textil Blanco Nieve, una de las más tradicionales de Río Grande, cerró sus puertas de manera sorpresiva el viernes 31 de octubre, dejando sin empleo a 35 trabajadores que se presentaron a su turno habitual y encontraron la planta cerrada. La decisión se produjo sin previo aviso y en medio de una prolongada crisis salarial que se venía agravando desde agosto.
Los empleados denuncian que la empresa, dirigida por Diego Russo, adeudaba los sueldos de agosto y septiembre, y que en septiembre había propuesto abonar los haberes en cuatro cuotas semanales del 25 %. Sin embargo, el pago se habría concretado sólo de manera parcial, con montos muy por debajo de lo comprometido. La situación llevó a que los propios trabajadores organizaran una venta directa de juegos de sábanas, en un intento por reunir fondos para sostener a sus familias.
“Nos presentamos como todos los días y nos encontramos con las puertas cerradas, sin ninguna comunicación oficial”, relató la delegada gremial Marcela Cárdenas, del Sindicato de Obreros y Empleados del Vestido y Afines (SOIVA). “Es una terrible canallada dejar a 35 familias en la calle de esta manera, después de meses de sacrificio”, agregó.
La crisis en Blanco Nieve no es un caso aislado. En las últimas semanas, varias plantas textiles de Tierra del Fuego han reducido su personal o suspendido actividades, afectadas por la caída de ventas, el aumento de costos y la apertura de importaciones. Desde el gremio advirtieron que la situación pone en riesgo a cientos de puestos de trabajo en la provincia y reclamaron la intervención urgente del Ministerio de Trabajo.
Fuentes cercanas a la empresa confirmaron que Blanco Nieve enfrentaba embargos y dificultades financieras desde mediados de año.La firma, que se dedica a la fabricación de frazadas y sábanas bajo el régimen promocional de la Ley 19.640, era una de las pocas del sector textil que aún mantenía producción estable en Río Grande.
Hasta el momento, no hubo comunicación oficial de la dirección sobre los motivos del cierre ni sobre el futuro de los trabajadores, que evalúan acciones legales y gremiales para reclamar los sueldos e indemnizaciones adeudadas. En tanto, el gremio prepara una presentación ante las autoridades provinciales para exigir una mesa de diálogo que evite nuevos cierres en la industria fueguina.
Fuente: Conclusión






