Voy a compartirles del libro de Apocalipsis del capítulo 22, los versos 18 y 19 para luego hacer una reflexión de los mismos.
“Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: si alguno añadiere a estás cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro.
Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro.”
Si bien es cierto que cuando habla de la profecía de este libro se refiere al texto que he nombrado, implícitamente, es para la Biblia en su totalidad.
Prueba de ello, es lo que expresa Moisés, el escritor del libro de Deuteronomio en el capítulo 4, verso 2:
“No añadiréis a la palabra que yo os mando, ni disminuiréis de ella, para que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo os ordeno.”
En correlato a lo anteriormente expuesto, está establecido en el libro de Proverbios capítulo 30, verso 6, lo que les voy a trasferir:
“No añadas a sus palabras, para que no te reprenda, y seas hallado mentiroso.”
Después habla del que cometa el despropósito de agregar algo al texto, lo cual traerá sobre el que lo hiciere las plagas que están escritas en el mismo.
El capítulo 16 es muy claro describiendo siete plagas:
*1° Plaga: úlcera maligna (verso 2)
*2° Plaga: el mar se convierte en sangre (verso 3)
*3° Plaga: las aguas se convierten en sangre. (versos del 4 al 7)
*5° Plaga: los hombres son quemados (versos 8 y 9)
*6° Plaga: oscuridad y dolor (versos 10 y 11)
*7° Plaga: la tierra tiembla por completo. (versos 17 al 21)
Posteriormente, el verso 19 asegura que “el que quita de la palabra de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida.”
Cabe destacar, que algunas versiones en lugar de “libro de la vida” hablan del “árbol de la vida”.
Al respecto les comento lo siguiente:
El libro de la vida está en comparación con el libro que las ciudades tenían en dónde se registraban sus ciudadanos.
Cada urbe guardaba el registro de los habitantes de la misma. Pero también la imagen se asimilaba al árbol de la vida.
Si bien es cierto que son distintas las figuraciones, a la vez son complementarias.
Respecto al árbol de la vida les explico lo que a continuación detallo:
En Apocalipsis, es símbolo de varias cosas, pero solamente voy a compartirles una de ellas que está en el capítulo 2, verso 7:
“El que tiene oido, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.”(Ap.22:2)
¿Quiénes son los vencedores que refiere el pasaje citado?
El Evangelio de Mateo en el capítulo 24, versos del 10 al 13 es muy claro en esta cuestión:
“Muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán.
Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará.
Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.”
Conclusión:
Mi ruego, es que se cumpla en cada uno de los que decimos ser creyentes lo que afirma el autor de la epístola a los Hebreos en el capítulo 10, verso 39:
“Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para la preservación del alma.”
Marcelo Margal: conductor y realizador del programa COMO PEZ EN EL AGUA, COMO PEZ EN EL AGUA CHARLAS VITALES
